Érase una Venecia sobre palafitos en el delta del Undoso, el río más sinuoso del Cuba. El gran río temido por sus honduras se la disputaba al mar, y no tuvo un dux que desposara al Atlántico, pero sí conoció las procesiones en bote de remos para su virgen marinera, y el rumor de los ahogados, y el temblor de los pecios, y el abrazo de los huracanes…
A
Hay gente que hurga en la costa. Qué buscan, le pregunto a Q. Ostras, responde, y no las hallan.
Pero nos queda la tarde –respiro cuando se encienden las luces de las boyas que señalan la ruta de los barcos- y ya nunca perderemos el mar.
7 comentarios:
Qué suerte la de los que sabemos que nunca se perderá el mar, al menos no del todo. Y la de los que buscan ostras sin encontrarlas porque al menos tienen el poder de la insistencia.
Feliz encuentro, viajero.
Tu
y.
Yordy, tengo un regalo para ti. Conoces las "danzas melopeas" de Ignacio Cervantes en la voz de Luis Carbonell?
Prepárate a reír, como en la última carcajada de Casal...
Dificil de creer,pero aunque parece que el destino nos aleja,no deja de unirnos: hoy mismo me he comprado un libro.el título? Tesoros de VENECIA..y luego vengo y hallo esto y no puedo evitar pensar tonterias estilo "serendipity",lo sabes..Te he escrito,espero respondas.Noche
Mi viajero, cierta vez me hablaste de ellas, pero no las conozco aún. Siempre me río con el acuarelista, así que si me tienes ese regalo, y viniendo de tí que es como adivinarme doble contigo, entonces tendré cuidado de dejar testamento y epitafio preparados.
Cuando vienen las danzas?
Tengo una gata que se llama Bebé. Es deliciosamente fea y por lo mismo, apasionada, febril y amorosa.
Con el mismo cariño de mi Bebé, te dejo un beso
P.d por cierto, he olvidado agradecerte mi retrato en tu templo nocturno, me da un poco de verguenza lo grande que sale.
Gracias por tenerme siempre presente.
¿Ya regresas, viajero?
Mi viajero, espero que tanto silencio sea por cuenta de las redes cubanas, la internet itinerante....
Empiezo a preocuparme.
te beso
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